El COVID-19 ha brindado a los actores de amenazas una gran oportunidad para llevar a cabo ataques más agresivos y numerosos, con herramientas basadas en la nube do-it-*yourself.
En 2020 se produjo un aumento del 62% en el ransomware, del 28% en el cryptojacking y del 66% en el malware de loT, así como un incremento del 74% en nuevas variantes de malware.
Amenazas que antes se pensaba que estaban a dos o tres años de distancia ahora son una realidad, con herramientas basadas en la nube do-it-*yourself y que crean un ejército de ciberdelincuentes armados con la misma fuerza devastadora y el impacto de un estado-nación o una empresa criminal más grande.
Las organizaciones tienen que permanecer atentas y proactivas para fortalecer su posición de ciberseguridad.
Enlace de la noticia: https://cutt.ly/UxbwR6G